Últimamente he visto una gran tendencia a emprender, lo cual personalmente me encanta. Pienso que una de las fallas hoy en la academia (Universidades y demás instituciones educativas) es que por muchos años han diseñado programas académicos para enseñar a la gente a ser empleados, no emprendedores, enseñan a ejecutar las ideas de otros, no a desarrollar las propias y por eso nos cuesta tanto emprender.
Otra tendencia no tan positiva que he notado, es que si el emprendedor falla a la primera no hay segundo chance, quizá es por esto que 19 de 20 emprendimientos fallan en los primeros 18 meses.

Como ustedes saben, yo soy emprendedor también, soy parte de proyectos y compañías como smartBeemo (Socio fundador y CMO), de Freemind (Socio y CMO) y de Asylum Marketing (VP Global y Socio en una oficina). ¿Suena glamouroso e importante verdad? Si bien hemos podido construir buenas cosas, la realidad es que el camino es de frustración y dificultad constante con picos de felicidad y logros, esa es la realidad. Hoy es Miércoles 3 de Agosto a medio día, no estamos aún a mitad de semana y ha sido una semana complicada llena de problemas, lo que es curioso es que la semana pasada fue quizá una de las mejores semanas en los últimos años, no se nos había quitado la sonrisa de la cara cuando empezaron a caer problemas como dominós.

Pues bien amigos, hoy les quiero dar 10 aprendizajes según mi experiencia de tristeza y fracaso constante para lograr más picos de felicidad y aguantar el camino del emprendedor, porque si quieres emprender, debes prepararte para dormir como un bebé… levantándote cada dos horas para llorar y vomitar.

  1. Te estás montando a una montaña rusa de fracasos y logros, no llores mucho cuando falles ni celebres tanto cuando triunfes, el reto es salir pronto del primero y mantener el segundo.
  2. No puedes tener a todo el mundo contento: Las quejas y problemas vendrán, cuando estás empezando te pones ansioso y te frustra no poder tener a todo el mundo contento, eso acabará por destruirte, prioriza los problemas y soluciónalos uno a uno.
  3. Dedica el 70% del tiempo a explorar y el 30% del tiempo a explotar: Hay que avanzar y descubrir nuevos caminos, si te quedas cómodo con lo que has encontrado te darás cuenta de manera muy dolorosa que la zona de comfort no es la zona de grandeza.
  4. Apóyate en tu equipo: No te eches todo encima de los hombros, a veces las mejores ideas y soluciones vienen de las personas que menos esperas.
  5. El cliente NO siempre tiene la razón: Si sigues todas las sugerencias y quejas de tus clientes terminarás haciendo todo y nada, encuentra los patrones y puntos en común, conviértelos en oportunidad y soluciona lo macro, no lo micro (es imposible de todas formas).
  6. Prepárate para cambiar tu idea, plan de negocio, modo de operación, etc. La parte difícil es entender cuándo, no lo hagas a la primera ni a la última pero entiende que Uber, Facebook, AirBnb, etc, empezaron con modelos de negocio y operativos muy distintos a lo que son ahora, fracasaron 100 veces, necesitaron múltiples rondas de capital y reorganización de los elementos. La diferencia entre ellos y los que fracasaron es que nunca dejaron de avanzar, re-inventar aprendiendo y no tuvieron miedo a modificar la idea inicial.
  7. Nunca dejes de aprender, lee, escucha y observa más de lo que hablas, cuentas y escribes. El camino del emprendedor es de absorción y poder juntar piezas en un rompe-cabezas, destruirlo y re-armarlo casi que a diario.
  8. Encuentra algo que nivele la desilusión constante: Encuentra el balance en el deporte, amor, mascotas, música o todas las anteriores, de lo contrario no aguantarás 1 mes.
  9. Escribe y documenta el proceso: Es clave ir de atrás para adelante y vice-versa en el proceso de emprender, entender qué funcionó y por qué en cierta etapa, para esto recomiendo escribir y documentar todo lo que pasa en tu emprendimiento.
  10. Ambición delirante: Si no suenas como un loco apasionado por lo que haces, no podrás convencer a nadie. Muchas veces he visto buenas ideas, estructura, metodología, todo en lugar para lograr grandes cosas y no pasa por la falta de un factor clave: La pasión, pienso firmemente que la pasión es la gasolina del éxito, si no la tienes súmate a alguien que la tenga.

Escribo esto no en un momento de grandeza y logro, ni pretendiendo compartir “pseudo-sabiduría”, lo escribo en un momento de dificultad, problemas, clientes inconformes y retos inesperados, por eso créeme que no había mejor momento para animarte a seguir.

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