En el mundo del emprendimiento no hay nada escrito, no hay fórmulas o atajos, pienso que lo más cercano a una fórmula es la de fallar mucho, rápido y barato hasta que encuentres algo que funcione. Lo anterior trae varios retos, pues en la dimensión de tiempo es difícil entender cuando es momento para intentar algo nuevo y surgen preguntas como: ¿Me estoy apresurando? ¿Tengo suficiente información para entender que esto no funciona? ¿Estoy abarcando mucho y muy superficialmente?
Ser valiente y asertivo es importante, hay que entender cuando algo no funciona y estar preparado para virar y seguir. Es el día a día del emprendedor y de las compañías conocidas por ser innovadoras. En mi propio caso, intento probar, fallar, seguir y encontrar lo que funciona en todo lo que hago, desde mis comunidades sociales, campañas para clientes, emprendimientos, etc.
Hoy quiero compartir contigo 10 señales o síntomas que no debes ignorar al momento de tomar decisiones en tu emprendimiento o gestión profesional:
- No estás disfrutando lo que haces: Si no estás conforme, disfrutando lo que haces sólo empeorará, pregúntate las razones, entiende si se puede solucionar o si a largo plazo te seguirá afectando, este es el indicador principal.
- No te gusta trabajar con la gente que tienes alrededor: Uno de los retos principales al emprender o trabajar en lo que sea es el de trabajar en grupos con equipos de gente con el que no tienes química, te pasan por encima o no respetan tu experiencia. Ese es otro gran indicador y es difícil que cambie o mejore la situación, trabaja con gente que te complemente y que respete tu experiencia.
- No ves la luz en el tiempo: Si estás apagando incendios diarios para sacar la cabeza y respirar pero sin luz clara en el futuro hay un problema, nadie puede sobrevivir a ese ritmo y no es justo para nadie, hay que trabajar fuerte pero siempre con una perspectiva grande de lo que es el éxito, con posibilidades y un plan para lograrlo.
- Sientes que no avanzas a pesar de correr a diario: Si sientes que no avanzas un centímetro en crecimiento, aprendizajes, ventas o el indicador que sea y llevas tiempo intentándolo es momento de ver alternativas.
- No hay validación externa de tu idea: A veces estamos tan cegados y tercos con nuestra idea que no vemos que al mundo no le interesa, eso no quiere decir que sea totalmente irrelevante, a lo mejor debes cambiar el mensaje o enfocarte en el beneficio más que en el producto.
- No estás descansando lo suficiente: Si no tienes tiempo para aclarar la mente y descansar el cuerpo caerás en todas las anteriores, es muy importante balancear el trabajo con descanso y dispersión.
- Todo en lo que crees/sabes se está derrumbando: Creer en algo es importante pero una mala ejecución puede derrumbarte toda creencia profesional, si empiezas a dudar en lo que crees, es momento de evaluar qué está pasando.
- Cuando pruebas todo y nada funciona: Usualmente tenemos plan A, B, C y D, luego de que todos fallan probamos AB, BC y DA, luego AD, BA, etc. Lleva trazabilidad de todos los intentos y ten cuidado con volver a fallar con A (en diferente manera) pues ahí es cuando caes en un pantano de fracasos.
- Cuando sientes que vives para trabajar y no al revés: Esta es un poco filosófica, pero no vinimos a este mundo para vivir trabajando, nos alquilaron un cuerpo por un corto tiempo, no lo gastes trabajando, disfruta, viaja, comparte, la vida es todo eso, cuando trabajas sólo esperas que lo anterior pase de nuevo.
- Cuando terminas en el piso de tu oficina en posición fetal: Si repetidamente terminas en el piso o en la cama en posición fetal o de camarón en desesperación porque no sabes qué hacer, considera un cambio, no hay NADA lo suficientemente importante en la vida para vivir preocupado, es así de simple.
No importa lo que hayas logrado, el nombre que hayas construido o el dinero que hayas acumulado, si no eres feliz, no disfrutas de lo que haces o la gente con la que lo haces considera un cambio, no soy lo suficientemente viejo para decirte que en futuro te arrepentirás, pero escucho a tantos viejos decirlo que he decidido hacerlo por mi mismo.